El Norte de Castilla
CULTURA
Un pueblo de partitura
La mayoría de las casas de Fuentesaúco de Fuentidueña, con 300 habitantes, guardan instrumentos musicales
20.12.09 - 01:25 - JESÚS BOMBÍN VALLADOLID.
En casi todas las viviendas de Fuentesaúco de Fuentidueña, localidad segoviana de unos trescientos habitantes, hay una bandurria, un laúd o una guitarra. Quien da fe de ello es José Ángel Melero, secretario de la asociación musical Tres Olmas, colectivo que este año ha logrado cumplir con la organización de la 13 edición del ciclo de conciertos 'Encuentros con la música'.
Esta iniciativa, que se ha asentado en el tiempo gracias a una arraigada afición musical de la que se presume en la localidad, ha llevado a Fuentesaúco de Fuentidueña durante las tardes de los sábados de noviembre y diciembre a grupos que representan desde la música más tradicional de dulzaina y tamboril, hasta conciertos de flamenco, de guitarra, violín, rock, punk o percusión.
Ayer se clausuró esta decimotercera edición de 'Encuentros con la música' con un concierto de la orquesta de plectro Ávila Pulso y Púa. La historia de este apego melódico tiene su origen en 1986. En la asociación de padres y madres de alumnos del colegio se acordó promover una actividad extraescolar no sólo para los chavales, sino extensiva al municipio.
Además, la iniciativa nació planeada para ser lo bastante atractiva como para enganchar también a los jóvenes que acudían al instituto a Cuéllar o a la Universidad en otras capitales.
«Claro que es llamativo que en un pueblo tan pequeño llevemos trece años organizando estas jornadas musicales», comenta José Ángel Melero, quien recuerda a un profesor de la escuela, Alfonso de la Fuente, como muñidor de ese conjunto de actividades que al final han contagiado a los habitantes del pueblo algo más que apego por la música.
Es más, evoca que todo empezó con una pequeña rondalla local, luego se constituyeron en asociación musical y más tarque, en el 2001, como orquesta de pulso y púa Tres Olmas. Ese mismo año sacaron su primer disco, 'España con mucho gusto'. La gente del pueblo arropa con su asistencia a los conciertos y se ocupa de que haya cantera de futuros músicos. De hecho, la asociación musical tiene un grupo de iniciación con cuatro alumnos de 8 a 12 años, otro de perfeccionamiento, con cinco miembros de 6 a 12 años y la orquesta, compuesta por 16 integrantes.
José Ángel Melero expresa su orgullo de que en el colegio de Fuentesaúco cursen estudios de infantil y primaria doce niños. Son la futura cantera melódica, la que debe coger el testigo para que el municipio segoviano siga siendo un pueblo donde las notas musicales están integradas en la vida cotidiana.
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