sábado, 26 de marzo de 2011

De la serie "Hablan de nosotros" Cobos de Fuentidueña

Nos envían la noticia periodística de 2009
Cobos de Fuentidueña aúna belleza natural y patrimonial, muy cerca del Parque Natural de las Hoces

10.07.09 - ELENA RUBIO ARAGONESES COBOS DE FUENTIDUEÑA

Cobos de Fuentidueña se encuentra situado en la ribera del río Duratón, entre San Miguel de Bernuy y Carrascal del Río.

Un término municipal que se localiza entre el embalse de las Vencías y el de Burgomillodo, a las puertas del Parque Natural de las Hoces del Duratón. Por eso, a nadie extraña que sus parajes estén salpicados por hendiduras creadas por el valle en el que se enclava, donde existe una amplia variedad forestal. Allí se pueden encontrar desde pinos pasando por enebros, almendros y campos de cultivos, configurando un precioso paraje de verdes y ocres. Pero este patrimonio natural no es el único que posee el pueblo, también es digno de resaltar el industrial y el religioso.

En cuanto al primero, en un cerro situado en la parte más elevada del pueblo se han excavado numerosas bodegas. En la actualidad ya no se cultivan las viñas pero en otro tiempo la producción de vino tuvo cierta importancia. Fueron construidas a finales del siglo XIX y principios del XX. Constan de un cañón y varios nichos.

En ese mismo cerro se encuentra parte del patrimonio religioso del pueblo, allí se localizan los muros de la ermita de San Benito. Sus ruinas ponen de manifiesto que se trató de un templo de pequeño tamaño de origen probablemente románico. Poseía una planta rectangular y el ábside presenta una característica un tanto extraña, como es la de ser recto al exterior y semicircular al interior.

La estrecha relación de Cobos con el cister viene de antaño ya que en el término municipal se situó el antiguo monasterio de San Bartolomé, que fue donado por Alfonso VIII al de Santa María de Sacramenia en 1174.

Esta influencia todavía hoy se aprecia en la arquitectura de la iglesia parroquial, dedicada a San Julián. Es una construcción de origen románico cuya cabecera consta de tramo recto y ábside. En éste se abren tres aspilleras enarcadas al interior y al exterior. En cada lado del tramo recto se disponen dos arcos ciegos, tanto dentro como fuera. El tramo recto se cubre con medio cañón y el ábside con bóveda de horno. El arco triunfal es de medio punto. Posteriormente se le adosó un gran arco apuntado que da paso a la nave, también románica, aunque de un momento posterior. En el lado sur se abre la gran portada de seis arquivoltas. Sorprende en ella, al igual que en el resto del edificio, la ausencia de decoración escultórica, una influencia cisterciense que también se manifiesta en el rosetón abierto a los pies de la nave. La pila bautismal es una pieza singular. Se encuentra situada en el sotocoro.

Obras

Ahora en verano las calles se vuelven a llenar con el bullicio de niños y muchos de los vecinos que durante buena parte del año viven fuera, aunque por lo general es un pueblo pequeño que apenas tiene cincuenta habitantes censados. Una circunstancia que hace que los presupuestos municipales sean muy pequeños para acometer obras. Por eso, cualquier ayuda de las Administraciones es poca. De esta manera, los 9.203 euros que les han correspondido del Plan E los han destinado a crear un pequeño parque público.

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